Comenzamos una exigente subida por el sendero, y según ascendemos podemos divisar a la derecha el embalse, hasta llegar al cordel de la sierra de Santa Catalina. Caminamos cientos de metros por la cresta de la Sierra, dejando a la derecha la cuenca del Tajo, hasta llegar al panel informativo, donde realizamos un reagrupamiento para esperar a los más rezagados.
Iniciamos el descenso por pista de tierra suelta, debido al paso de la maquinaria que recientemente ha estado limpiando el cortafuego de la Sierra, hasta volver a adentrarnos a la Dehesa Boyal, esta vez para acercarnos a conocer al majestuoso alcornoque singular denominado "Padre Santo", muy bien conservado, y el lugar perfecto para hacer la parada del avituallamiento.
Recuperadas las fuerzas, comenzamos la ligera subida hasta el cruce del camino que da acceso a los restos del Castillo de Mirabel (S. XV), ubicado en lo alto del cerro del Acero, construido sobre una fortaleza anterior que desempeñó un destacado papel en la reconquista de la zona. En dicho Castillo se cuenta que sucedió la batalla de "los trece panes", que dio lugar al escudo de los trece panes empleado por los primeros señores de Mirabel.
Visitado el monumento, descendemos por el sendero paralelo a la carretera hasta la población de Mirabel, haciendo un total de 15,73 km. en un tiempo de 4 horas 38 minutos.
Fotos de la ruta, pincha aquí.
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